Una vez concluida la Semana Santa, nuestros colaboradores han hecho balance de lo que han sido unos días de los que han destacado el gran ambiente. A juicio de ellos, el nuevo horario de la salida procesional del Jueves Santo ha provocado que mucha gente mayor haya podido salir. Sobre la jornada del viernes, recordaban la gran afluencia al momento del encuentro entre el Cristo Yacente y la Virgen de los Dolores. Sobre este aspecto, Patricia Carrasco ha querido tener palabras para el rezo del ángelus, una de las citas que más le emociona de todas estas jornadas y que no es tan conocida. El amplio número de personas jóvenes e incluso niños ha sido otro de los aspectos a resaltar, apuntando al párroco, Manuel Quero, como máximo responsable con su buen hacer para que se acerquen tantos jóvenes y menores a estos actos.
Uno de los puntos discordantes ha sido el cierre de bares y restaurantes durante los días festivos. Sobre ello había quien opinaba que se habían marchado cuando los ubriqueños y turistas les puede dejar un buen dinero y cuando la gente más los echa en falta. No obstante, otros creen que estos negocios privados son libres para abrir y cerrar cuando quieran. Al hilo de ello ha surgido el debate sobre la falta de camareros en la localidad.
La hostelería también ha sido protagonista a raíz de la noticia que se hacía eco de la práctica de bares en España que adoptaban la costumbre de la propina “a la americana”, donde es moralmente obligatorio dejar un 20% de la cuenta total. Algunos de nuestros contertulios lamentaban que tuviéramos la mala costumbre de adoptar todo lo que hacen en Estados Unidos y defienden que la propina es voluntaria y no debe venir reflejada en el ticket. Otros comentaban que el ubriqueño suele ser más generoso cuando sale del municipio que cuando consume en negocios locales.
Por último, la subvención para la remodelación del Cine Capitol también ha ocupado parte del espacio de tertulia. Una necesidad -tal y como señalaban todos- de hace muchos años. “Necesitamos una sala en condiciones para potenciar todos los espectáculos culturales, de todo tipo, teatro, cine… Lo más importante es la cultura porque nos da educación y respeto”, afirmaban al tiempo que pedían que se iniciaran las obras lo antes posible porque también servirá para quitar focos de infecciones, en alusión a las ratas vistas por los vecinos en las últimas fechas. Esta buena noticia “se une a la de la apertura de la oficina comarcal de expedición del DNI, que da vida a los pueblos y supone apostar por los espacios rurales, más en Ubrique que no cuenta con una buena ubicación con respecto al resto de pueblos”.